y llega el día en que te sentís mejor, mucho mejor. Buscás en el placard el vestidito de colores que archivaste años atrás, te pintás los labios de un rojo betty boop y salis a caminar por Corrientes. Los chicos te miran y está bueno que lo hagan. Hacía falta volver al ruedo. Sentirse linda.
Sos libre de tu pena, y de él. Llamativamente no lo pensaste ni un momento en el día. Lo dejaste ir. Lo dejaste.
Es hora de volver a ser feliz, es hora de que te quieran bien, es tu hora.
3 comentarios:
ai!!!!!!!!
¿Y que pasa si quiero liberarme de mí mismo?¿Como me dejo y sigo adelante sin mí, sin pensarme?
ah, ahi no te puedo ayudar, pablito
te puedo prestar mi labial, a ver si colabora en algo.
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