domingo

Había comprado un juguito de tomate de árbol; escuchar a la señora desde las 6 de la mañana ofreciéndolo -paradita en mi ventana- hacía ya aproximadamente un mes, me había terminado convenciendo de que era lo mejor que podía sucederme en la vida, o a lo sumo en Quito.
Doblé por la esquina que no, concentrada en terminar el ultimo capítulo de pulpa, y un grafitti bacano me hizo reir un ratito, reir y aplaudir. Decía:

PODRÁS TENER A TODOS
PERO MORIRÁS VIRGEN SIN MI.


poesía de la tricolor under, for export

No hay comentarios: